La ceremonia, un oasis de belleza adornado con flores vibrantes y detalles delicados, fue el escenario perfecto para su unión. Arlynis, resplandeciente en su vestido de novia, caminó hacia Ireno, quien la esperaba con el corazón desbordante de amor. Sus votos, pronunciados con voces llenas de emoción, sellaron su compromiso ante la mirada amorosa de familiares y amigos.